Mi iPad y yo seguimos de luto, y ahora con mayor razón para mi iPad. Muere Jobs y antes se me murió Bonelli. Curiosamente, los tebeos de Bonelli son los que mejor se leen en el iPad. Este último parece diseñado para leer Martin Mystere y Dampyr. O Zagor. Sin necesidad de tener el tebeo en la mano. Les enlazo el famoso discurso que Jobs dio en Stanford en 2005 porque es HERMOSO. Cuando superé mis depresiones de los 20 años y mis intentos de suicidio, cuando regresé del descensus ad inferos, me convertí al vitalismo y renegué de Cioran (a quien debo la vida por En las cimas de la desesperación) y de los intelectuales muermo y llorones. Volví a reencontrarme con Henry Miller y la alegría de vivir. Comparto lo que dice Jobs porque pienso igual. Si mañana me muero, lean esto por mí en mi funeral.
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1 comentario:
Inspirational. No se me ocurre otra manera de decirlo en una palabra.
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