jueves, abril 25, 2013

JUEGO DE TRONOS 1 Y 2


En general me han gustado mucho las dos temporadas de la serie que constituye el hit del momento: Juego de tronos. A falta de ver la tercera temporada, que, según tengo entendido, ahonda en más de lo mismo, pero con mayor presupuesto, la 1 y la 2 me ha dejado un grato sabor de boca: una confrontación entre distintos reinos en una Edad Media muy reconocible, pero ubicada en una especie de universo paralelo (o sea: es la Edad Media, pero no es la Edad Media: hay dragones, magia y brujería, muertos vivientes, los siete reinos no han existido jamás, etc.); personajes interesantes interpretados por buenos actores; unos guiones hábiles que saben comprimir cada uno de los tochos monumentales que constituye la serie de novelas en que está basada, Canción de hielo y fuego, de George R. R. Martin; majestuosos exteriores y formidables decorados (con ayuda de efectos especiales y recreaciones por ordenador); violencia y sexo como en la vida misma, pero más, porque en el cine siempre tiene que haber más; algunos desnudos femeninos que alegran la pupila de vez en cuando y que, más que las tramas “adultas”, ya vienen siendo parte de la marca de HBO.


Algunos amigos me han hablado con fascinación de las novelas en que se basa la serie. Parece ser que son absorbentes, muy bien escritas, con numerosos cambios de punto de vista narrativo, trepidantes, con una plétora de personajes bien trazados y una multitud de relaciones personales para todos los gustos; giros dramáticos imprevistos… A pesar de estas buenas recomendaciones, no me atrevo a echarle el diente a la primera, ya que, aunque no tengo miedo de los mastodontes literarios, tampoco tengo tiempo para ellos (demasiados libros debo leer por obligación, lamentablemente), pero la verdad es que me pica la curiosidad y no me extrañaría probar un día de estos. Veía en las librerías de Madrid a los clientes llevarse todos los tomos de la serie en una sola columna como si se tratara de ladrillos para la construcción de un palomar en el terrado de su casa.


El único "pero" que yo le pondría a esta serie es que, en lo personal, ya he consumido cientos de libros y cómics de similares características. Todas las historias me suenan a ya oídas, ya vistas, ya leídas. Juego de tronos viene a ser un compendio de más de lo mismo, un compendio excelente, pero su capacidad propositiva, novedosa, me resulta limitada. Eso a mí, claro. Por no hablar de que lo que hace Martin, como haría cualquier novelista inteligente, es basarse en la histórica Guerra de los Cien Años para construir sus tramas. Y es que, en estos tiempos en que casi ningún ciudadano sabe de mitologías y de Historia, el buen escritor debe beber de ellas. ¿Para qué intentar contar una historia nueva, si todas las historias ya han sucedido o han sido contadas? Ahora sólo hay que recombinarlas (ejem…, me temo que siempre fue así).


Thumbs up: la esmerada y refrescante interpretación de Peter Dinklage como Tyrion Lannister. Desde los remotos tiempos de Freaks, en que los enanos eran todavía considerados monstruos, el infame Bombero Torero de nuestra infancia, pasando por el formidable Michael J. Anderson de Carnivale, llega por fin un actor enano que no sólo consigue desarrollar cierto sex-appeal y ganarse el interés y la simpatía de los espectadores con su cínico, sabio, ebrio y putero personaje, sino que reivindica la presencia “normalizada” de los enanos en el cine y la televisión más allá de su presunto interés como atracción de circo. Su actor ganó el Emmy y el Globo de Oro del pasado año por su interpretación en Juego de tronos al mejor actor secundario.
Dos preciosuras para gozar la mirada: una madurita y una joven, Lena Headey interpretando a la requetemalvada e incestuosa reina Cersei Lannister (la madrastra de Blancanieves en versión actualizada, dos fotos abajo) y Emilia Clark como Daenerys Targaryan (última foto), la última representante del reino y la dinastía de los Targaryen, quien en la primera temporada nos descubre un tremendo secreto de su naturaleza que habrá de dar mucho juego en adelante. Dos mujeres de las que da gusto ver. Y en la segunda temporada aparecen más: Oona Chaplin (hija de Geraldine, nieta de O´Neill y Charlot), y sobre todo Natalie Dormer, recién re-capitadita después de pasar por Los Tudor


Y por último, la moraleja, la lectio: en estos tiempos en que las democracias occidentales no son más que cadáveres en estado de descomposición, en que los gobernantes viven sólo para lavar los calzones de los grandes poderes económicos, Juego de tronos parafrasea esta realidad y plantea como tesis que siempre ha sido así: que quienes se toman la molestia de gobernar el mundo no lo hacen para que nadie les tosa encima. Que el poder, el sexo y el dinero, o vienen juntos y a lo gordo, o no valen para nada, y que, en definitiva, el juego de tronos, sin dragones ni reminiscencias medievales, de fantasía heroica, ni artúricas ni shakesperianas, sigue siendo el pan nuestro de cada día. Al fin y al cabo, si uno lo mira con un poco de imaginación, los siete reinos de Juego de tronos se llevan tan mal entre ellos como los estados de la Unión Europea. Sólo fingen consenso ante el rey más fuerte, un rey al que todos, en el fondo, les encantaría acabar degollando. 

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Ricardo,

Fíjate que ya tenía un rato que estaba indeciso en entrarle o no a ver este programa de HBO, todo mundo habló por mucho tiempo de este famoso "Game of thrones". Me gané enemistades en mi club de cinéfilos local por no ver este show.

Gracias a este pequeño empujoncillo yo creo que sí le voy a entrar y por lo menos voy a darle una miradita a la temporada uno. Pssss ¿Por qué no?

Gracias por tus comentarios y espero que te esté llendo bien amigo. Saludos a la familia.

Ojalá algun día nos reecontremos por allá en mi querido México.

Con cariño y amistad,

Félix aka "Conde de Montecristo"

El Pobresor Gafapasta dijo...

Llégale a Juego de tronos, hombre. Dentro de lo coherente, siempre hay que ver aquello de lo que habla la gente, para opinar. Yo empecé a verla por esa misma curiosidad. A mí me está gustando, así que..., te recomiendo que empieces ya.

Nomás lleva mucho cuidado con los Caminantes Blancos.

Saludotes desde tu querido México.

Cortinas dijo...

Esta serie esta buenisima siempre cierro las cortinas de mi negocio para que no me molesten para ver la serie buenisima.