Dibujante absolutamente genial, de trazo nervioso y lleno de vigor, Franquin (1924-1997) ha sido una de las grande influencias europeas del cómic. Son muchos los autores que se han desarrollado imitándolo, y hasta plagiándolo (un ejemplo de una y otra cosa podría ser Francisco Ibáñez). Su obra más famosa, Spirou, el eterno botones adolescente vinculado con Fantasio y el Marsupilami (creación exclusiva de Franquin). Y después, Gastón Lagaffe, insuperable personaje que el ya citado Ibáñez tomaría como inspiración de su botones Sacarino (una hábil mezcla de los dos emblemáticos hijos de Franquin). Uno, de chinorri, disfrutaba sus aventuras en la legendaria revista Strong, y más tarde, en la irregular Spirou Ardilla; irregular tanto por la dificultad para encontrarla en Murcia como por la calidad discutible de la revista en su conjunto. Y en la adolescencia, el gran descubrimiento que supuso en Cairo las Ideas Negras. Un par de álbumes de las mismas deambulan por la Mulita. El autor de la fichita de esta ocasión fue Joan Navarro, editor en aquel tiempo de la revista Cairo.
Clicar sobre las imágenes para ver a mayor tamaño. Estas fichas fueron publicadas en la tercera de forros de cada fascículo de la Historia de los Cómics (Toutain Editor, 1982) y no han vuelto a ser reeditadas desde entonces. El © de los textos e imágenes pertenece a sus respectivos autores. Estas fichas se publican aquí con intención exclusivamente divulgativa y educativa.
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