miércoles, febrero 28, 2007

PALABRAS DE DON ANTONIO ALVAR

Me llega este recorte, vía aemilium interretis, de la Sociedad Española de Estudios Clásicos. Publicado en El Mundo, el 7 de febrero del año en curso. Lo comparto con aquellos a quienes pudiere interesar.

martes, febrero 27, 2007

FANTASCOPÍA: JUNTOS HASTA LA MUERTE (1944)

JUNTOS HASTA LA MUERTE. De Raoul Walsh. (“Colorado Territory” 1944.) Con Joel McCrea y Virginia Mayo. USA. Warner Bros. (****, de 4)

¿Existe o existió alguna vez un director de cine que no hiciese jamás un film de baja calidad? ¿Ni tan siquiera mediocre? Pues bien, Raoul Walsh, “el último tuerto de Hollywood”, cuyas bromas serán siempre recordadas por lo exagerado a veces de su pesadez –por ejemplo: Walsh llegó a robar junto con Errol Flynn el cadáver de John Barrymor de la funeraria— no hizo jamás ninguna obra mala. Para ser más exactos sólo una hasta ahora me parece bastante discutible: Furia de venganza (Gun Fury), interpretada por el acartonado Rock Hudson que fue quien restó parte del encanto a la obra. Por eso, ahora se le da a Walsh la importancia que verdaderamente tiene (“Sólo Sabemos Apreciar a los genios cuando ya no están aquí”) aunque no fue por eso por lo que hizo tantas películas –133—. Una de ellas fué “High Sierra” –“El último refugio”— en la cual fué lanzado al Mito-cosmos Humphrey Bogart. Años después de dirigida propone hacer un “remake”, pero ambientado en un “Western” solitario y abandonado. De ahí el nacimiento de esta película.

Walsh —como ya me duele el brazo de decir—, tenía el portentoso e inigualable don de saber dirigir, y una vez más nos lo vuelve a demostrar en un film de crudeza y al mismo tiempo romanticismo inigualable, –de ahí que sea considerado como una de sus obras maestras—. El excelente dúo McCrea-Mayo hacen su cometido a la perfección, sinceramente mejor Mayo que McCrea, y también se discute hoy sobre si ésta fué o no la mejor actuación de esta mujer, discusión en la cual yo intervengo opinando que su inmortalidad como actriz se encuentra en “Al rojo vivo, tambien de Walsh. Actores aparte, Raoul Walsh lo hace como sólo él sabía. Corrijo: como sólo unos pocos sabían.

(1982)

¿Qué es una fantascopía? Un texto crítico adolescente, un resto de naufragio del tiempo en que internet y los blogs eran inimaginables. Durante mi adolescencia me dediqué a escribir a mano sobre todas las películas que veía, con esa indiscriminación propia de quien busca aprender. El millar de películas que comenté ocupan miles de páginas. A pesar de la mala redacción y de la puerilidad de algunas opiniones, suelo compartir todavía el criterio general que expongo sobre cada film. Hago públicos estos papeles ingenuos de un bloguero adolescente. La fecha en que cada crítica fue redactada aparece al final de la misma.

lunes, febrero 26, 2007

FICHAS TOUTAIN XLVIII: EDGAR PIERRE JACOBS

Maestro del tebeo europeo, el belga Jacobs comenzó a ser conocido en España a través de una revista de recuerdo imborrable: Cairo, dirigida a la sazón por Joan Navarro. Eran los tiempos ochenteros de la posmodernidad y la post-movida (incluso, por qué no, de la movida de provincias) y éramos felices hartos de calimocho, releyendo a Cioran y descubriendo tebeos y artistas que nos hacían soñar. Nunca un tebeo ha sido mejor compañero para una tarde de lluvia que SOS Meteoros, aventura gloriosa de Blake y Mortimer escrita y dibujada por el hallazgo feliz que en los ochenta fue para algunos la obra de Jacobs. Hoy tengo toda la colección de Blake y Mortimer y estoy a punto de lanzarme a la adquisición de las nuevas aventuras, escritas y dibujadas por epígonos de Jacobs que, oh maravilla extraña, no desmerecen del maestro. La fichita de hoy la escribió el gran Salvador Vázquez de Parga.

martes, febrero 20, 2007

FANTASCOPÍA: LA MOSCA (1958)

LA MOSCA, de Kurt Newman. (“The Fly”, 1958). Con Vincent Price, David Hedison y Patricia Owens. USA. Twentieth Century Fox. (****, de 4)

Este director, alemán nacionalizado americano (1908-1958) realiza aquí una de las mejores cintas de ficción científica y cuyo guión es del popular escritor australiano James Clavell.
“La mosca”, además de ser una película excelentemente dirigida tiene la particularidad de estar interpretada –casi de forma secundaria— por Vincent Price, otro de los “grandes” del “thriller”, de un modo bastante moderado y convincente. “La mosca” pertenece a esa larga serie de títulos realizados por una clase especial de directores que creaban films de clase “B” pero que lograban una amplia calidad cinematográfica. Por otra parte esta cinta contiene un par de escenas estupendas.

1982

FANTASCOPÍA: SED DE MAL (1958)

SED DE MAL, de Orson Welles (“Touch Of Evil”. 1958). Con Charlton Heston, Janet Leight, Orson Welles y Marlene Dietrech. USA. (****, de 4)

Entre la escasa filmografía de Welles como director podemos encontrar tres principales: “Ciudadano Kane” (1941), “El proceso” (1962) y “Sed de mal” (1958). “Sed de mal” es la menor en calidad, pero viniendo del gran maestro es un film magnífico en toda regla.

Los atractivos del cine del Orson Welles son numerosos. Cuando nosotros, por la noche, soñamos, se nos da a conocer un mundo extraño e incoherente, confuso y hasta absurdo a veces. Como pudimos comprobar en “El proceso”, cuando nosotros soñamos estamos como viviendo un film de Welles, su cine es abstracto y complicado, el cine de Welles en nuestra personalidad es el calco exacto de nuestro subconsciente. En “Sed de mal” la técnica cinematográfica empleada no puede ser considerada kafkiana, sino Orson Welles abordando un tema claro con su habitual riqueza de psicología, de nobleza cinematográfica... “Sed de mal” es la perfecta artesanía de uno de los genios del cine... aunque nadie comprenda sus mensajes. Desde el fondo de “Sed de mal” brilla la gran llama de la inmortalidad porque si un día este director, actor, argumentista, vago y con una gran maestría sobre su masa gris fuese olvidado –cosa que jamás sucederá— el cine no merecería llevar el distintivo de “arte”.

1982

FANTASCOPÍA: ENVIADO ESPECIAL (1940)

ENVIADO ESPECIAL, de Alfred Hitchcock. (“Foreign Correspondant” 1940). Con Joel McCrea y Laraine Day. USA. (****, de 4)

Antes de lograr el Oscar con “Rebecca” (1940), Alfred Hitchcock dirigió en USA otras obras como ésta, considerada como una de las mejores de su filmografía. “Enviado Especial” es una obra maestra para empezar, Hitchcock con su habitual maestría y genialidad consigue crear escenas admirables como por ejemplo la de el choque del avión con las aguas del mar. Su cine, extraño y tenebroso, no hace gala aquí; es más, esta cinta es un film de espionaje desarrollada con particular maestría y eficacia por él, como era de esperar, pero su dirección no es como por ejemplo la de “Psicosis” (1960) o “Recuerda” (1945) más oscura y espeluznante, que jugaba un papel importantísimo por tener una fuerza psicológica tremenda. Aquí, la pelicula gira en torno a una organización criminal e internacional que mantiene en tensión pero que no logra hacer admirar el tan excelso genio narrativo del que haría gala en toda su carrera. Pero no obstante “Enviado especial” –ofrecida en principio para Gary Cooper, que la rechazó— es toda una clase de cine. Además este grandioso film contiene secuencias maestras dignas del gran maestro que fué Alfred Hitchcock.

1982

FANTASCOPÍA: SUSPENSE (1961)

SUSPENSE, de Jack Clayton. (“The Innocents” 1961). Con Deborah Kerr y Pamela Franklin. USA. (****, de 4)

El cine de terror es hoy día un mito, un mito que evidentemente hace sufrir, porque el terror es algo que está ahí, que nos estremece porque sabe tocar nuestro punto más débil, el miedo. Yo he pasado pocas veces miedo, o llamémosle sufrimiento, viendo un film, por lo menos porque yo sé perfectamente qué estoy viendo y sé que todo eso queda en una película. Las dos únicas cintas que hasta hace unos días me han hecho temblar han sido “El resplandor” de S. Kubrick —la mejor película de terror que he visto— y “El otro” de Mulligan. Pasados esos días pude ver esta otra, y también me estremecí... Raro... “Suspense” cuando se estrenó en España fue considerada inmoral —que lo es un poquito—, terriblemente mala —que no lo es— y tachada de grosera y chabacana —que les den por saco—. “The Innocents” es un delicioso film con el que hay que llevar extremo cuidado... “The Innocents” es capaz de poner los pelos de punta al más bravo. La trama —genial, por cierto— es algo atrevida y el desarrollo de la historia es fortísimo, por ejemplo: hay una escena en la cual dos niños —apenas 8 años cada uno— se hacen el amor. Hay otras escenas fuertes pero el resultado es admirable. Deborah Kerr, en su papel, demuestra estar loca perdida... y el director, Clayton, logra secuencias escalofriantes.
El guión de la película en el cual intervino el célebre escritor Truman Capote, es excelso y sobre todo da duro, es un ejemplo de lo que tiene que ser un guión en cine y esta cinta lo es de lo que debería ser una cinta de terror.

1982

FANTASCOPÍA: EL TESORO DE TARZÁN (1941)

EL TESORO DE TARZÁN, de Richard Thorpe. (Tarzán’s Secret Treasure) 1941. Con Johnny Weissmuller y Maureen O’Sullivan. USA. Metro Goldwyn Mayer. (**, de 4)

Richard Thorpe es quien dirige las últimas cintas de este personaje de Edgar Rice Burroughs. En su labor no destaca una huella especial de autor, conque estas películas van, pues, envejeciendo notablemente, hasta que su estructura nos parece simple y hasta un poco cursi. No obstante, no envejecen el dominio de los animales, la eficacia de Weissmuller para el papel, pese a no ser un buen actor, la atractiva figura de Maureen O’Sullivan y unos eficacísimos decorados Metro.

1982

FANTASCOPÍA: SÓLO LOS ÁNGELES TIENEN ALAS (1939)


SÓLO LOS ÁNGELES TIENEN ALAS, de Howard Hawks. (“Only Angels Have Wings”. 1939). Con Cary Grant, Jean Arthur y Rita Hayworth. USA. (****, de 4)

Howard Hawks (1890–1979) es hoy en día considerado como uno de los más grandes clásicos del cine USA. La cinta que nos ocupa en estas páginas es un ejemplo excelente –uno más, desde luego— de lo que podríamos llamar cine de aventuras, pero que está contado con tal habilidad que pasa de ser típico cine de aventuras mal contadas y con realizadores de poca monta a estar dirigidas por grandes genios del celuloide. Hawks se desenvuelve con admirable maestría en un ambiente de hecho ya problemático, y sobre todo duro, en el cual ha de verse la trama más forzada y más torcida hasta que poco a poco los personajes vayan dejando su maniqueísmo y su artificialidad hasta desarrollarse con absoluta libertad como caracteres espléndidamente definidos. Howard Hawks logró aquí, entre otros grandes aciertos, lograr una perfecta sintonización ambiental, haciéndonos partícipes de la acción desde nuestras moradas.

1982

lunes, febrero 19, 2007

FICHAS TOUTAIN XLVII: GRAHAM "GHASTLY" INGELS

Precisamente ayer me dormía leyendo una historieta de Graham Ingels, joya de la legendaria EC Comics, aquella industria que sufrió el acoso y derribo de una bola de puritanos dirigidos por una camarilla de psicólogos patanes entre quienes se encontraba el nefasto Frederic Wertham. Corrían los feos años del macarthismo y el mentado Wertham tenía la burda teoría de que los cómics (y en especial los de la EC) contribuían al clima de violencia juvenil y consumo de drogas en que estaba presa la nación. Wertham se arrepentiría años más tarde de sus afirmaciones, y lo hizo en un foro dedicado a los comic-books del que fue echado virtualmente a patadas. Tarde había llegado para todos el arrepentimiento del pendejo. Quienes han leído los excelentes cómics que editó EC, casi todos realmente formidables, saben que la elevada calidad de éstos los ha convertido en paradigma del relato corto contado en viñetas. La reciente edición española de Planeta (en formato enano y blanco y negro) ha tenido sobre todo la virtud de divulgar un tesoro desconocido. Quienes quieran apreciar mejor estos dechados de talento, harán bien en comprar la reedición recién estrenada en las librerías de Estados Unidos. La ficha de hoy, por Moncho Cordero.

Clicar sobre la imagen para ver a mayor tamaño. Estas fichas fueron publicadas en la tercera de forros de cada fascículo de la Historia de los Cómics (Toutain Editor, 1982) y no han vuelto a ser reeditadas desde entonces. El © de los textos e imágenes pertenece a sus respectivos autores. Estas fichas se publican aquí con intención exclusivamente divulgativa y educativa.

jueves, febrero 15, 2007

NAZARÍN (1959), DE LUIS BUÑUEL

Nazarín pertenece al cine más realista de Buñuel. Lo adornan, y le quitan solemnidad, las escenas surrealistas. Buñuel sigue pareciendo a muchos un autor duro, principalmente por su surrealismo. En estos tiempos en que todo vale, es habitual escuchar voces críticas contra el bueno de don Luis. A mi entender, el surrealismo de Buñuel forma parte de su socarrón sentido del humor, y su mayor presencia en las películas que rodó las realza como divertimentos intelectuales. Don Luis, Billy Wilder y Fellini fueron, en mi opinión, los grandes maestros de la comedia del cine sonoro, y en los tres casos su sentido del humor tiene una honda raíz intelectual. Filmes buñuelianos como El ángel exterminador o El discreto encanto de la burguesía son formidables comedias oscuras cuyo humor no puede complacer a todos, pero es un humor que existe y que para muchos puede ser muy disfrutable.

Basada en la célebre novela de Galdós (uno de esos genios de la literatura que merecen ya una reivindicación universal) cuenta en esta ocasión con un comedido y profundo Paco Rabal que interpreta al padre Nazario, un sacerdote que se busca la ruina al comportarse estrictamente de acuerdo con sus principios. No va a ser la única vez que don Luis aborde el tema de “los infortunios de la virtud”. Su película Viridiana, por ejemplo, es una paráfrasis de Los infortunios de la virtud, subtítulo famoso de la novela Justine, del Marqués de Sade. También en esta ocasión, como en Nazarín, centraría su tesis en una persona perteneciente al orden religioso, esta vez una monja. También contemplaría al orate y sus tentaciones en Simón del desierto, para abarcar de esta manera los tres elementos más representativos del orden religioso: el místico desintegrado del orden institucional de la religión y dos individuos “integrados” en él cuya ingenuidad les hace creer que un comportamiento ejemplar será la senda de realización dentro de la orden, pero resulta ser lo contrario: Viridiana es brutalmente violada por aquellos a quienes buscaba proteger, y su vergüenza la aleja de los hábitos; Nazario, hombre predestinado al sacrificio y a la filantropía motivada por su pura e intensa fe en Dios, es visto como un apestado por el resto de la institución eclesiástica.

Otro aspecto interesante en la obra de don Luis es el torrente de erotismo soterrado. Viridiana es una santa deseable, pero al final del film (desprovista de los hábitos de monja y con el cabello suelto) es una mujer más. Nazarín (interpretado por el galán Paco Rabal) es adorado por las mujeres mientras continúa siendo sacerdote, pero su caída en desgracia provoca el rechazo de las mismas mujeres que antes le idolatraban y, de manera velada, le deseaban sexualmente; antes se hallaba provisto del erotismo de la santidad, lo que queda muy claro en la escena final: una de ellas, reconciliada con su amante, pasa en carro junto a él mientras éste avanza pesadamente por la carretera donde lo conducen preso. Ella ni siquiera se vuelve para mirarle por última vez. Erotismo y religión fueron para don Luis conceptos relacionados desde su misma infancia, desde que éste, todavía un niño, se masturbaba en la iglesia contemplando una imagen de la Virgen (cf. Primer capítulo de su libro de memorias, Mi último suspiro).

Nazarín no es una de las películas más divertidas de Buñuel (desde el punto de vista de la relación surrealismo/humor), pero sus múltiples posibilidades simbólicas (siempre negadas por don Luis) guardan todavía enormes posibilidades de análisis.

Nazarín (1959). Dirección: Luis Buñuel. Guión de Luis Buñuel y Julio Alejandro. Fotografía de Gabriel Figueroa. (****, de 4). Más información, IMDB.

martes, febrero 13, 2007

70 AÑOS DEL PRÍNCIPE VALIENTE

Tal día como hoy, el 13 de febrero de 1937, se publicaba la primera página dominical de una obra fundamental dentro de la historia de los cómics: El Príncipe Valiente (ampliar viñeta para disfrutarla en todo su esplendor). Como la literatura tiene su Homero, sus trágicos griegos, su Shakespeare, su Cervantes y toda esa caterva de autores que, independientemente del flujo de las novedades, hay que releer de vez en cuando para recordarnos por qué demonios seguimos leyendo literatura en estos tiempos de grisedad, también el cómic, a pesar de sus poco más de cien años de vida, tiene sus grandes clásicos que hay que releer de vez en cuando. Cada uno sabe cuál y cuándo, aunque cien años dan para un buen puñado de clásicos de cajón, imprescindibles en la biblioteca de un verdadero aficionado al medio (porque claro, aficionados al cómic no hay muchos; no confundamos con los voraces lectores de cualquier manga o cualquier superhéroe). Y claro, el Príncipe Valiente es una de esas obras majestuosas cuya lectura es impostergable cada cierto tiempo. Porque limpia, fija y da esplendor cuando la relees, y porque te reconcilias con un medio demasiado lleno de algo que odio a muerte en cualquier medio: la grasienta capa de novedades. Detesto la novedad, lo que no quiere decir que no procure estar al día en cine, literatura o cómic. Lo cual lamento muchas veces, porque, con tantas obras buenas para releer o volver a visionar, cómo fastidia perder el tiempo en una bagatela recién salida de las máquinas. El Príncipe Valiente ha cumplido 70 años de vida. En Estados Unidos concluyó hace poco la edición de Fantagraphics, y en España están coincidiendo dos ediciones en el mercado, una en versión estándar y a color de Planeta y otra en tamaño grande y blanco y negro exquisitamente editada por el portugués Manuel Caldas. Son buenos tiempos para releer de una vez esta obra superlativa e inigualable. O para leerla por vez primera. Más sobre el Príncipe Valiente y Hal Foster, en esta Ficha Toutain.

lunes, febrero 12, 2007

FICHAS TOUTAIN XLVI: BURNE HOGARTH

Me fascinó de niño con una serie que duró apenas un año en las dominicales de los periódicos estadounidenses: Drago. Esta serie transcurría en mitad de la Pampa argentina y su protagonista, el tal Drago, era una mezcla de cowboy justiciero y ladino tanguero seductor de mujeres. Unas mujeres que Hogarth dibujaba esplendorosamente bien. Discípulo aventajado de Harold Foster, reemplazó al maestro en la página dominical de Tarzán. Su maravillosa labor estuvo a la altura del creador de Príncipe Valiente. Acabo de conseguir un par de volúmenes que Hogarth dibujó sobre Tarzán en los 70 y son una maravilla absoluta. Hogarth dominó como pocos la anatomía humana que condujo a cimas de estilización pocas veces igualadas. Un artista irrepetible. La ficha de hoy la escribió Mariano Ayuso.

Clicar sobre la imagen para ver a mayor tamaño. Estas fichas fueron publicadas en la tercera de forros de cada fascículo de la Historia de los Cómics (Toutain Editor, 1982) y no han vuelto a ser reeditadas desde entonces. El © de los textos e imágenes pertenece a sus respectivos autores. Estas fichas se publican aquí con intención exclusivamente divulgativa y educativa.

domingo, febrero 11, 2007

VIERNES NEGRO, DE DAVID GOODIS

Antes de sumergirme en las aguas procelosas de 2666, la novela póstuma de Roberto Bolaño, leí en Murcia Viernes 13, novela de David Goodis que no hay que confundir con la saga cinematográfica de terror. El título original es Black Friday, y así la voy a denominar a partir de ahora en español: Viernes Negro. Los protagonistas de esta obra, unos salteadores de mala muerte que un viernes, un viernes de mala fortuna, intentan robar una mansión llena de valiosos tesoros artísticos sin conseguirlo. En realidad la anécdota es intrascendente, como tantas veces en la novela negra: lo que cuenta para Goodis es describir a unos personajes sórdidos, unos buscavidas de quinta categoría que son incapaces de llevar a buen puerto sus proyectos delictivos y acaban por devorarse entre ellos. Como en el caso de Tras el rostro, mi primera experiencia con Goodis, Viernes negro es un poco absurdo, inverosímil, diálogos chispeantes, relaciones sexuales enfermizas, pero da igual: prevalece por encima de todo un relato duro con diálogos sintéticos, el retrato de un ambiente claustrofóbico y viciado, y finalmente, la sensación de haber asistido al retrato de los más perdedores de todos: aquellos que ni siquiera por medio del robo y el asesinato pueden conseguir sus objetivos. David Goodis, considerado como el gran escritor maldito de la novela negra junto con Jim Thompson, era un individuo inadaptado que vagó de aquí para allá disfrutando poco del éxito que obtuvieron algunos de sus títulos y que le llevaron, incluso, a recalar en un Hollywood que para la sensibilidad de Goodis resultaba deprimente. Como en el caso de muchos otros, como el grande y ya citado Jim Thompson, su obra ha sido desenterrada y convenientemente reivindicada desde hace tiempo.

jueves, febrero 08, 2007

ADIÓS A ANNA NICOLE SMITH

Ha muerto la máxima reina contemporánea de la vulgaridad: Su Majestad Anna Nicole Smith. Pasada de pastillas, seguro. Quizá sólo se puedan decir malas cosas de ella, y todas serán verdad, pero siempre me atrajo enormemente esta mujer en todas sus comparecencias. Era pueblerina y chabacana, chillona y estridente, pero a su manera fue una perfecta visión carnal y femenina de Jekyll y Hyde. Su biografía no la resumiré aquí, porque en otros lugares puede leerse: desde la prostitución a la portada del Playboy (modelo del año 1992), casada por la pasta con un viejito forrado de petrodólares a quien mató a polvos, continuamente peleada con el buen gusto, su falta de cerebro justificaba en sí misma (y sólo en ella misma) todos los chistes misóginos que circulan por la red: ¿Qué hace una neurona en el cerebro de Anna Nicole Smith? ¡Pues turismo!
Muñeca de goma para múltiples fantasías libidinosas, engordó hasta convertirse en la más hermosa vaquilla del show-bussines internacional. Las mujeres modernas la odiaban (y con razón) tanto como muchos hombres la usaban y seguro la despreciaban. A mí, que soy un enamorado de lo felliniano y lo esperpéntico, me chiflaba esta chiquilla y buscaba con cierto arrobo su reality en el canal E! Entertainment: The Anna Nicole Show. De veras que me encantaba, desde sus primeras comparecencias “ligera de equipaje” en Playboy hasta, por qué no confesarlo, con 30 kilos de más y las mantecas bamboleantes para pasmo y asombro (o admiración) de los espectadores del coliseo global. Lo diré sin vergüenza: obesa me gustaba mucho más, no ha habido nunca una gorda más bella en toda la historia de la representación femenina en el mundo occidental desde que se inventó la fotografía.
Decir que ha muerto Anna Nicole no es decir cualquier cosa. Se me cae una lágrima al pensar que ahora ya sólo será banquete pantagruélico para los gusanos. Ya vendrán los libros, los memorabilia y las producciones de Hollywood sobre esta criatura perdida, blablabá, que viajaba en cohete de colores por la galaxia buscando en vano la tienda donde una tarde de adolescencia empeñó su cerebro por unos cuantos dólares. Ha nacido una leyenda-trash. No sé los demás, pero yo la echaré de menos. Descansa en paz, pobre chiquilla bella y desafortunada, cabeza de chorlito.

miércoles, febrero 07, 2007

FICHAS TOUTAIN XLV: GEORGE HERRIMAN

No es la primera vez que escribo sobre George Herriman, el sensible y extraño creador de una obra maestra como fue Krazy Kat. Obra lírica, profunda, leve, llena de una gran belleza que cada vez que cautiva me vuelve a emocionar con un temblor. Una obra de una sencillez extrema que encierra, como casi siempre ocurre, la complejidad más abismal. Planeta la edita ahora en español, cosa que quizá le agradezcan algunos lectores sensibles. La edición es la misma de Fantagraphics, pero la de Planeta tiene a su favor la publicación en tapa dura. Por lo demás, ni la rotulación ni, por supuesto, la traducción (ay, esta obra es intraducible, hay que aprender inglés para gozarla) le hacen justicia a la versión original. Hay experiencias en la vida (sí, muchachitos) que compensan el haber pasado largas época con los codos clavados sobre los libros mientras más allá del cuarto olvidado de todos el mundo giraba y se divertía. La fichita de hoy se la debemos a Javier Coma.

Clicar sobre la imagen para ver a mayor tamaño. Estas fichas fueron publicadas en la tercera de forros de cada fascículo de la Historia de los Cómics (Toutain Editor, 1982) y no han vuelto a ser reeditadas desde entonces. El © de los textos e imágenes pertenece a sus respectivos autores. Estas fichas se publican aquí con intención exclusivamente divulgativa y educativa.

jueves, febrero 01, 2007

DIARIOS DE FESTIVAL, DE ÁNGEL DE LA CALLE

En el camino de parangonarse con la literatura des-dibujada, el tebeo alcanza en su periodo de madurez nuevos formatos y géneros que hasta hace bien poco eran impensables. La literatura nos ha acostumbrado, desde antiguo, a la lectura de epistolarios y diarios. Podría citar, entre los primeros, el epistolario de don Francisco de Quevedo, y entre los segundos, los diarios de Anaís Nin. Son sólo dos ejemplos entre cientos. Sin embargo, ¿cuándo habíamos visto que un tebeo fuese el diario de su artista? Al contrario de lo que sucede con actores o estrellas del rock, la vida de los dibujantes de cómics suele ser bastante gris, siempre esclavizados delante del tablero de dibujo, así que uno puede plantearse con toda legitimidad: ¿por qué debería interesarme un volumen sobre las penas y alegrías de un pintamonas? La respuesta está en la misma tradición literaria: a veces, los diarios son interesantes en sí mismos porque el autor tiene un punto de vista interesante sobre su propia vida, si es que su propia vida no tiene las cualidades novelescas requeridas para convertirse en libro de éxito (lo cual casi nunca ocurre). Todo esto viene a cuento porque no puedo dejar de hablar de uno de los mejores cómics que he leído durante estos últimos doce meses. Si alguien me preguntara mi opinión, Diarios de Festival, de Ángel de la Calle, estaría entre los diez primeros.

Diarios de festival es el diario de Ángel de la Calle. Inmersos en la moda de los diarios pintados o carnets (Sfar, Trondheim, Gallardo…), de la Calle se une a este selecto círculo de autores y nos presenta esta memoria de sus múltiples actividades durante la gestación y transcurso de la XVIII Semana Negra de Gijón, principalmente, y también en otros festivales dedicados al tebeo donde este autor, principalmente durante el tiempo en que dibujaba estos Diarios, promocionaba su gran obra Modotti. Son muchos los elementos que hacen grande este proyecto intimista y pequeño que es, en apariencia, Diarios de festival. Por una parte, la descripción meticulosa de la vorágine laboral que hace posible uno de los mayores acontecimientos del verano, la Semana Negra de Gijón, donde de la Calle puede convivir y charlar con los mejores autores del momento; por otra parte, el espontáneo intimismo de esta obra: las esperas a que salga su hijo Sergio del colegio estimulan la reflexión y la creatividad de este autor, y esos momentos que podrían haber sido muertos en cafeterías obligadas por las circunstancias, se convierten en el crisol de reflexiones a veces hondas, a veces muy peregrinas, pero siempre nos entusiasman por su nada fingido tono de rebanada de vida; por último, tenemos el dibujo de esta obra: rápido, caricaturesco, los bocetos de Ángel de la Calle nos demuestran la madurez de este artista cuando dibuja sin querer ser preciosista o cuidadoso. No todos los diarios o carnets de dibujantes merecen igualmente la pena, e incluso alguno ha caído en mis manos que demuestra ser un verdadero engañabobos: puras pajas mentales dibujadas con las patas sin el más mínimo interés desde ningún punto de vista. Este puede ser el mayor riesgo de este nuevo género de la narrativa gráfica: que sus autores crean que emborronando cualquier cuaderno con sus discutibles ocurrencias o garabatos pueden tener presencia constante en el mercado con trabajos de tercer nivel sin demasiada autoexigencia. Desde este punto de vista, los Diarios de festival de Ángel de la Calle demuestran una coherencia interna, una concepción temática muy precisa y un acabado formal ligero y fresco, siempre intimista y reconfortante.

Ignoro si hoy todavía será posible encontrar en las librerías españolas los Diarios de Festival. Su primera edición constó de sólo 500 ejemplares y en él se nos advierte de que este libro nunca será reimpreso ni nuevamente editado. En definitiva, quienes ya lo tengan en sus manos guardan un valioso tesoro: el tesoro que resulta de mirar en el interior de un artista fecundo que contempla su entorno y su profesión con una mirada tierna y emotivamente humana.

Ángel de la Calle, Diarios de festival. AAHA. Dentro de la viñeta, 1. Gijón, febrero de 2006.