Crucé el charco el pasado 11 de junio en buena compañía lectora. Las turquesas cortinas se abrieron de nuevo mientras yo me hallaba en mitad de la selva ensimismado en los relatos truculentos de Horacio Quiroga. Ciertas personas me han hablado con pasión de este autor, y yo me pregunto por qué demonios no le he conocido hasta tan viejo. Bueno, la pregunta se responde fácilmente: mi educación eurocéntrica durante infancia y adolescencia, y más tarde mi licenciatura en Filología Clásica, me obligaron a perderme grandes lecturas de autores latinoamericanos. Pasé mi adolescencia leyendo autores españoles que no revisitaré jamás (no daré nombres), y sin embargo me perdí lecturas como la de Quiroga. En los planes de estudio que yo seguí (y eran mejores que los actuales) había que leer a tal o cual porque habían sido escritores españoles destacados según la cronología temporal, pero quedaron fuera grandes autores latinoamericanos, ingleses, y de otras nacionalidades. Toda esta fijación ombliguista ha degenerado, entre otros “partos de los montes”, en los estudios “de género” y los estudios “regionales”, que se pueden resumir de la siguiente manera: debo dedicar más tiempo a estudiar la pelusa de mi ombligo que a analizar los piercings de zafiro que lucen algunas muñeconas mejor agraciadas.
miércoles, junio 29, 2005
LECTURAS DE CHARCO: HORACIO QUIROGA
Crucé el charco el pasado 11 de junio en buena compañía lectora. Las turquesas cortinas se abrieron de nuevo mientras yo me hallaba en mitad de la selva ensimismado en los relatos truculentos de Horacio Quiroga. Ciertas personas me han hablado con pasión de este autor, y yo me pregunto por qué demonios no le he conocido hasta tan viejo. Bueno, la pregunta se responde fácilmente: mi educación eurocéntrica durante infancia y adolescencia, y más tarde mi licenciatura en Filología Clásica, me obligaron a perderme grandes lecturas de autores latinoamericanos. Pasé mi adolescencia leyendo autores españoles que no revisitaré jamás (no daré nombres), y sin embargo me perdí lecturas como la de Quiroga. En los planes de estudio que yo seguí (y eran mejores que los actuales) había que leer a tal o cual porque habían sido escritores españoles destacados según la cronología temporal, pero quedaron fuera grandes autores latinoamericanos, ingleses, y de otras nacionalidades. Toda esta fijación ombliguista ha degenerado, entre otros “partos de los montes”, en los estudios “de género” y los estudios “regionales”, que se pueden resumir de la siguiente manera: debo dedicar más tiempo a estudiar la pelusa de mi ombligo que a analizar los piercings de zafiro que lucen algunas muñeconas mejor agraciadas.
martes, junio 28, 2005
TÉCNICAS DEL GUIÓN 2 Y 3: CONFLICTO Y OBSTÁCULOS
El conflicto es el ingrediente esencial de cualquier obra dramática. Sin conflicto no vamos a tener una historia que interese a la audiencia. Sin conflicto, la gente permanece indiferente hacia lo que contempla en la pantalla. El conflicto no necesariamente procede de tiroteos o de catástrofes, sino del deseo del protagonista por conseguir algo que es difícil de conseguir. Esto se aplica no sólo para la película completa, sino también para las escenas de que está compuesta. Si nadie quiere nada en una escena, esta escena carece de conflicto; si nadie quiere nada a lo largo de una película, la película carece de conflicto e interés dramático.
3. Obstáculos (Obstacles, p. 47).
El protagonista y su objetivo son los dos primeros elementos importantes dentro de la construcción de una historia. El tercero son los obstáculos. Sin impedimentos para que el protagonista consiga lo que quiera, no hay conflicto y no hay historia. A veces hay varios impedimentos para que el protagonista consiga su objetivo, y uno sigue a otro como en Romeo y Julieta. A pesar de que la unidad de una historia depende de que exista un solo objetivo claro, los obstáculos para que el protagonista consiga su objetivo pueden ser múltiples y variados.
domingo, junio 26, 2005
TÉCNICAS DEL GUIÓN I: PROTAGONISTA Y OBJETIVO
El protagonista es el personaje principal, pero su principal característica es un fuerte deseo por conseguir un objetivo o alcanzar una meta, y es este deseo intenso lo que produce el interés de los espectadores por la historia. El movimiento hacia el objetivo determina el principio y fin de la historia. Desde el principio de la mayoría de los guiones bien construidos, el escritor dirige nuestra atención hacia uno de los personajes (p. 43). El interés de los espectadores por el personaje es directamente proporcional al empeño que el personaje ponga en conseguir su deseo (p. 44).Sólo a la luz del objetivo del protagonista puede planificarse un guión de cine, ya que la persecución de este objetivo determina el transcurso de la acción. A continuación proporcionamos los tres puntos principales a recordar sobre el objetivo (p. 45).
1.1. Un solo objetivo principal para cada personaje. Sólo debe haber un objetivo principal para que la película tenga unidad. Un protagonista con objetivos diversos que salta de uno a otro rompe la columna de la obra y disipa nuestro interés. Que otros personajes tengan otros objetivos o deseos no es incompatible con el hecho de que, como espectadores, seguimos la persecución del objetivo del protagonista.
1.2. El objetivo debe generar oposición para producir conflicto. El objetivo deber ser capaz de crear oposición con el fin de producir conflicto. A veces esta oposición procede de otro personaje, de la naturaleza o de las circunstancias de la historia, y también del interior del propio protagonista. Si no hay oposición, no hay conflicto; si no hay conflicto, no hay drama.
1.3. La naturaleza del objetivo determina la actitud de la audiencia.La naturaleza del objetivo es el elemento fundamental que determina cuál será la actitud que la audiencia tomará hacia el protagonista y su oposición. Si el objetivo es heroico, lo admiraremos; si es detestable, repudiaremos al protagonista y desearemos su fracaso. El protagonista y el objetivo están tan identificados en nuestras mentes que no hay manera de separar uno de otro.
viernes, junio 24, 2005
TÉCNICAS DEL GUIÓN: GENERALIDADES
Como veo que el tema ha suscitado interés, comienzo con un resumen de las generalidades, antes de hacerlo propiamente con las técnicas. A ver qué pensáis. La fuente, insisto, es The Tools of Screenwriting, de Howard y Mabley. Quien viva en Madrid lo encuentra ahora mismo en la librería Ocho y Medio. Y los de fuera, vía Amazon punto Com.
Los siete responsables de que una película resulte buena o mala: el director (director), productor (producer), los actores (players), el director de fotografía (cinematographer), el diseñador de producción (production designer), el montador (the editor) y el escritor o guionista (the writer). A veces, también el compositor de la banda sonora (composer) es absolutamente esencial.
De acuerdo con estos dos autores (p. 23), los elementos esenciales que deben darse en cualquier historia dramáticamente bien contada son cinco. Estos cinco requisitos argumentales consiguen atrapar al espectador, tanto de una obra de teatro como de una película. Es necesario mencionar aquí que este libro se basa en un antiguo texto de Edward Mabley sobre la escritura de textos dramáticos que ha sido adaptado por David Howard a la escritura de guiones cinematográficos. De ahí la doble autoría del volumen.
1. La historia trata sobre alguien por quien sentimos empatía.
3. Protagonista, antagonista y conflicto (p. 28)
Muchas películas tienen una antagonista muy claro, es “el malo”. En este caso el protagonista (“el bueno”) tiene un conflicto de carácter externo con otra persona. Sin embargo, en muchas películas el protagonista es también su propio antagonista, puesto que el conflicto del protagonista es interno. A veces, el conflicto interno y externo se dan al mismo tiempo. En Casablanca, Rick tiene un doble conflicto: comprometerse o no con la causa de Victor Laszlo (interno) y sus problemas con el general Strasser (conflicto externo).
4. Drama objetivo y subjetivo (p. 32):
Ejemplo de drama objetivo: un bebé que gatea junto al filo de un precipicio; una mujer que saca un arma. En el momento dramático objetivo, la situación es de gran tensión por sí misma. En el drama subjetivo, nosotros sabemos algo sobre los personajes que nos obliga a preocuparnos por ellos. Ejemplos de drama subjetivo: si sabemos que un hombre padece claustrofobia y este hombre debe permanecer encerrado en un armario, se creará una escena que nos mantendrá a la expectativa; si además el hombre se encierra en el armario con objeto de conseguir algo que es más importante que su miedo, la expectación por lo que pueda experimentar crecerá en nosotros. La mayor parte de las buenas películas mezclan el drama objetivo y subjetivo constantemente.
jueves, junio 23, 2005
LAS TÉCNICAS DE LA ESCRITURA DE GUIONES
Actualmente me encuentro en Murcia llevando a cabo actividades relacionadas con mi tesis y que me requieren en la capital del reino de Valcárcel. También, claro, aprovecho para estar con la familia y reconciliarme con el sabor del whiskey con hielo en compañía de los amigos, sumergido en antros llenos de humo de cigarrillo.
martes, junio 21, 2005
SARTRENARIO
Hoy/ayer día 21 Sartre nacía hace cien años. Los gacetilleros y críticos, así como la oficiosa oficialidad de los vendedores del nuevo Occidente que se lava la cola en el bidé relumbrante de China insisten en cuán importante fue, y cuán desfasado se encuentra hoy día su discurso. Quizá tengan razón, pero para mí siempre será el autor de un libro emocionante que me hizo comprender durante la adolescencia el amor que las palabras de la literatura merecen: Las palabras. Era ésta una obra donde Sartre evocaba sus vivencias infantiles y su vinculación mágica y profunda con el mundo de la literatura, el nacimiento de una fascinación que sólo terminó con su muerte. Feo, chaparro, bizco, fumador y camandulero, Sartre fue un sapo cuyo hechizo no concluyó tras el beso de miles de princesas Nalganieves que parirían enanitos para este reino globalizado y neoliberal. El autor de Las palabras, genio de otro tiempo que ya no es el nuestro, es otro genio más que aguarda en el purgatorio un nuevo vuelco de la percepción de nuestro presente y lo que nos reste de futuro.
lunes, junio 20, 2005
ARCHIVO: EL DISTANCIAMIENTO GIMENIANO
Tirando de archivo, que en estos días no hay mucho tiempo para más. Publicado en Antonio Busquets (ed.), Homenaje a Carlos Giménez. Ediciones Flash Back. San Sebastián, 2003.
viernes, junio 17, 2005
LA NOVELA PASIONAL
Recientemente terminé de leer con enorme gusto unos ejemplares de la serie La Novela Pasional. Ésta fue una de las muchas series eróticas que se editaron en la España de los años veinte, lo que quiere decir que ya son clásicas. Los títulos han sido: La insaciable, de Luis León (LNP, 2), Un hombre y dos mujeres, de Fernando de la Milla (LNP, 3) y El hombre que agotó el amor, de Aurelio García Carreras (LNP, 4). Son novelitas que se editaron en formato bolsilibro, con ilustraciones picantes y temas procaces. Al principio uno piensa que estas novelas (que rondan alrededor de las 60 páginas y se leen de una sentada) son antiguallas, tonterías inocentes que podían parecer escandalosas hace más de ochenta años, y hoy no. Es cierto que hoy no escandalizarían a muchos, sin duda, pero de inocentes no tienen nada, y tanto las situaciones como el lenguaje revelan la maravilla de descubrir que existió una literatura erótica basura cuyo redescubrimiento es sumamente gozoso. Hoy las reedita, en edición facsímil, la Editorial Renacimiento. Tanto La insaciable como Un hombre y dos mujeres tratan de personajes sexosos que por manipular a sus presas acaban experimentando un trágico final. Debía de ser, de manera razonable y sin prostituir el contenido, una concesión a la moral de la época que la novelita de marras tuviese, al fin y al cabo, una especie de enseñanza moral: mal muere quien folga mal. A veces, sin embargo, la brusca descripción de esa muerte, la rudeza del lenguaje incluso, desmienten cualquier intención moralizante y da a entender que la intención del autor incurre más bien en el humor negro, como en el párrafo final de La insaciable: No dijeron más... La muerte pasó su guadaña cortando dos hilos de una vez... Quedaron inmóviles aquellos cuerpos que tantas caricias se habían prodigado. En el rostro de él se dibujó una sonrisa de satisfacción; el de ella se desfiguró, contrayéndose con un gesto de rencor; con una mueca de odio y dolor se llevó una mano al coño...
viernes, junio 10, 2005
NO HAY BLOG HASTA EL 16 DE JUNIO
ÚLTIMA ACTUALIZACIÓN, Y ME VOY
jueves, junio 09, 2005
PUBLICIDAD: REVISTA TRUENO
lunes, junio 06, 2005
REVISTA TRUENO
Permitamos que resuene el Trueno. La revista TRUENO sale a la calle coincidiendo con el Salón de Cómic de Barcelona (del 9 al 12 de junio). Se trata de una nueva revista, de periodicidad anual, realizada íntegramente por seguidores, estudiosos y artistas de aquel Capitán que un día de los años 80 interrumpió su cabalgada legendaria: El Capitán Trueno. Decir en España El Capitán Trueno es invocar a un personaje que el año que viene cumplirá 50 años de presencia ininterrumpida en el mercado y que se encuentra en todas las bibliotecas del país y en todas las librerías especializadas. Qué pena tener que decir que no en todos los corazones, porque desde 1987 casi no han aparecido nuevas historias más allá de homenajes puntuales: sólo reediciones y más reediciones del material clásico que arrancó su publicación un día de junio de 1956. Ya he hablado aquí mismo del carácter libertario de este personaje que, acompañado de sus fieles Crispín y Goliath, vivía en una Edad Media elástica al gusto de los intereses de su creador, el novelista Víctor Mora. Este Capitán medieval de resonante nombre volaba en un fantástico globo ideado por el sabio Morgano y estaba comprometido con Sigrid, la reina de la mítica Thule de los más fieros vikingos. Todos las anacronías eran válidas para crear la obra maestra del tebeo de aventuras español en una época en que todavía existía una industria del tebeo nacional. Quien quiera empaparse de más detalles sobre el personaje, que entre en la imprescindible página que Alberto Álvarez-Perea dedica al personaje.
La revista TRUENO saldrá una vez por año, gracias al tesón de los integrantes de la Asociación y Foro de amigos del Capitán Trueno (principalmente, gracias al tesón de tres personas para quienes pido un aplauso: Paco Nájera, Rosa Camiña y Alberto Álvarez-Perea). No soy el más adecuado para juzgar una revista de divulgación en la que yo mismo he colaborado (se publica un artículo mío sobre el portadista Antonio Bernal que colgaré próximamente en esta bitácora) y con la que tengo una implicación sentimental, pero creo que va a merecer la pena que TRUENO salga al mercado, porque el aficionado al personaje no se va a encontrar con un simple refrito de lo ya dicho y leído, sino que hay material inédito: numerosas ilustraciones originales, una entrevista con el gran portadista Antonio Bernal y una sustanciosa conversación entre dos de los últimos artistas prometeicos que concedieron tinta, carne y vida a Trueno: Paco Nájera y Jesús Redondo. Además, artículos de Carlos Álvarez, Paco Nájera, Iñigo Iturzaeta, Emilio Gallego, Manuel Montes, Francisco J. Valero, José María Baena, José Antonio Ortega Anguiano, José Gregorio Jiménez y el tal Ricardo Vigueras. 52 páginas por sólo 4 euros de nada, con portada inédita de Jesús Redondo que es la que encabeza estas líneas.
En definitiva, una cita obligada para aquellos completistas o aficionados que quieran saber más sobre la andadura de este personaje clásico, y un aperitivo mientras soñamos con que Ediciones B (o quien sea) vuelva a sacar nuevas historias de este personaje enormemente querido y recordado.
Permitamos que resuene el Trueno.
miércoles, junio 01, 2005
A PROPÓSITO DE ALAN DAVIS 1
El otro día me quedé con ganas de colgar algunas imágenes del trabajo de Alan Davis para Batman: Año Dos. No he querido escarbar entre las viñetas y reproducir alguna donde la acción se convierta en protagonista, en lo que se conoce como drama objetivo (un combate, alguien que desenfunda una pistola, etc.) sino en lo que más me atrae en los cómics: el intimismo. Recuerdo que una de las series populares que más me hizo disfrutar a principios de los 90 fue la reedición del los Classic X Men de Claremont y Dave Cockrum. No precisamente por la historia principal, sino porque completaba cada número una breve historieta de corte intimista donde se nos hablaba de la vida cotidiana de los grandes héroes. Los guiones también eran de un muy potable Claremont, y los dibujos corrían a cargo de un artista que hizo un trabajo delicada y con hieratismo clásico: John Bolton. De nuevo Claremont no inventaba nada, pues, como aseguraba el clásico Lucrecio y comenté ayer, nada nace de la nada: Stan Lee revitalizó el género de los enpijamados con esta estratagema, y con el tiempo otros ahondaron en ella con fortuna. Tampoco fue invención de Lee, un genial pirateador de los clásicos, y es posible que el propio Lee lo haya reconocido en alguna parte. Ya en Homero asistimos a la vida cotidiana de los dioses griegos y a sus miserias, calentones y rencillas. Con todo ese material y más se publicó un libro muy divertido: La vida cotidiana de los dioses griegos, de G. Sissa y M. Detienne (edición española, Temas de hoy).
A PROPÓSITO DE ALAN DAVIS 2
El segundo ejemplo explica ante un conquistador Bruce Wayne el secreto de sus palabras: las tres viñetas que reproduzco están en la plancha siguiente y también en esta ocasión ocupan el centro de la página: tres viñetas que repiten idéntico plano, tres viñetas monásticas, tres viñetas que transmiten una sensación de fijación, de serenidad con determinada contundencia. El vidrio de la puerta se difumina para no reflejar nada: ni luces, ni árboles, ni vida. El reflejo vacío, el cristal mudo sin reverberaciones asiste como testigo a la determinación de ella y a la sorpresa de él. Sólo entonces, en una imagen muy plástica por su contundencia, ella se vuelve una sombra que se aleja del mundo.
No se trata, tengo que decirlo, de un momento antológico de la historia del cómic; no se trata de unas viñetas que abran caminos nuevos a la narrativa gráfica. Simplemente son bellos, tienen esa belleza sencilla e intimista que se agradece tantas veces cuando leemos historias de grandes héroes, y el truco es viejo como la literatura. La extrema simplicidad de su artificio narrativo es tan evidente que propulsan la contundencia de su mensaje.
Y bueno, Bruce Wayne se la ligará al fin y le pedirá su mano, y ella accederá, pero al conocer la muerte de su padre determinará la entrada en el convento para redimir el mal que él hizo en vida. Y Bruce Wayne se quedará hecho un pasmarote, como es sabido de todos: hecho un murciélago y un pululador consuetudinario de los tejados.
UN AÑO DE BLOG
Hoy, 1 de junio, esta bitácora cumple su primer año de vida, y espero que no sea el último. Quiero agradecer a todos cuantos frecuentan esta página su compañía, y también sus eventuales comentarios. Esta página nació con la vocación prosaica de ir colgando algunos de los artículos que he publicado por aquí y por allí. Para que una vez publicados sirvieran para algo más. Enseguida esa funcionalidad de cementerio de hámsters se modificó, y el blog comenzó tener vida propia, y comencé a escribir en él con un lenguaje que intenta alejarse del tono formal del crítico o del académico y que pretende ser, ante todo, mestizo, pero también sarcástico y hasta burlesco. El flujo de visitantes continúa, y sin lectores esta página no sería más que un un barco de papel capitaneado por un pato de goma en una palangana. Por esto, un año más tarde, os doy las gracias y os invito a seguir curioseando y criticando las bondades y miserias de mi mestizaje cultural.