miércoles, mayo 30, 2007

TRANSTERRADOS

Acabo de ver dos entrevistas a Roberto Bolaño, el gran escritor chileno recientemente fallecido y autor de la magna 2666, novela que será, imagino, parteaguas de la literatura de este cuarto milenio. Ambas entrevistas televisivas fueron rodadas en Chile, cuando Bolaño, vagabundo de los limbos literarios, regresó a Chile, ese “extraño país” a decir de sus entrevistadores, un Chile que era su Chile, el Chile de Bolaño al que él regresaba después de tantos años. Y regresó como un transterrado, ajeno a las mafiecillas pueblerinas del mundo literario de su tierra, ajeno un poco también a Chile. Y volvía sin recordar muy bien algunas expresiones chilenas, sin recordar muy bien el nombre de algunas calles y cosas, como vuelve todo transterrado al hogar que le vio nacer; y Bolaño retornaba después de vagar y vivir en Argentina, México y España, país este último del que tantos se marchan, al que tantos llegan, país donde Bolaño ganó el Herralde con Los detectives salvajes y se hizo Bolaño el escritor famoso. Retornaba Bolaño a Chile con una mirada cálida pero distanciada hacia su tierra, como miran todos los transterrados, que hacen justicia al gran poema de Robert Louis Stevenson, The Far-Farers, un poema en el que puede reconocerse cualquier transterrado:

The broad sun,
The Bright day:
White sails
On the blue bay:
The far-farers
Draw away.

Light the fires
And close the door.
To the old homes,
To the loved shore,
The far-farers
Return no more.

Que en traducción de Javier Marías queda así (R.L. Stevenson, De vuelta del mar. Poemas. Poesía Hiperión, 27):

El inmenso sol,
El brillante día:
Velas blancas
sobre la azul bahía:
los que viajan lejos
desaparecen.

Encended los fuegos,
Cerrad la puerta.
Al viejo hogar,
A la costa querida,
Los que viajan lejos
Ya nunca vuelven.

Quien vuelve a casa no es ya el mismo que se fue. Otros climas, otras costumbres y otras gentes le han cambiado, sus ojos se han abierto a otras realidades, ha tenido que labrarse un camino distinto en una tierra nueva, ha debido empezar de cero en un paraje donde muchos lo tienen todo, y los recién llegados de otras tierras no tienen nada. El transterrado puede regresar mil veces a casa, y mil veces será en cierto sentido el mismo que se fue, pero mil veces será otro distinto el que llega. Los que se van, decía Stevenson, ya nunca vuelven. Pero sí vuelven, aunque no como quienes se fueron, sino como los otros en quienes aquellos que partieron se han convertido.

Eran dos entrevistas para la televisión chilena después del éxito de Los detectives salvajes. Bolaño fuma y fuma (murió, ay, de problemas hepáticos, él que no bebía una gota, no tuvo la suerte de que llegara a matarle el tabaco) y recuerda con cariño sus años mozos de ladrón de libros en librerías chilenas. Y sobre todo se sorprende de estar de nuevo en Chile, un país donde se encuentra, por primera vez en tantos años, rodeado de chilenos. Y es que, confesaba Bolaño no sin cierto orgullo, ya se había acostumbrado a ser el único chileno en todas las regiones del mundo, y a poder decir con toda razón: Chile soy yo, y esto es lo que hay. Me hizo gracia su atinadísimo punto de vista porque lo comparto: como far-farer que soy, como transterrado, en estas regiones del mundo donde habito, España soy yo, y punto. Quizá sea por este celo nacionalista, no sé si patriotero, que huyo como de la peste de paisanajes y de peñas de españoles que se juntan una vez a la semana, comen paella y beben rioja y dicen mira de lo que se pierde el murciano renegao éste giliposhas. No hay nada como creerse único, y encima la representación hecha carne de un pueblo milenario. Además, un español no le sirve para nada a otro español fuera de España: ni somos tan fraternales como los chinos, que enseguida se organizan para llenar la ciudad de tienditas de baratijas y tesoritos de botellón, ni tenemos esa comunidad elegante y cultivada como la judía. Los españoles, para bien o para mal, somos un pueblo cainita acostumbrado a huir de algo que sigue en nuestro inconsciente y nos atormenta. Cada quien se limpia la mugre de sus uñas con su propia navaja de Albacete.

martes, mayo 29, 2007

FICHAS TOUTAIN LVII: B. KRIGSTEIN

Acabo de terminar la lectura de dos volúmenes que Fantagraphics publicó más o menos recientemente sobre B. Krigstein. Uno de ellos es una excelente biografía de Greg Sadowski, especialista en los EC Comics y en quienes crearon, mientras pudieron, aquel enorme legado artístico y literario que tanta influencia generó; el segundo volumen es una atología de diversas historietas de Krigstein, donde podemos advertir el enorme contraste que hay entre las que este artista ilustró para EC y las que no (guiones más bien planos, historias sin demasiada relevancia). Krigstein es sobre todo recordado por la excelente historia Master Race, y antes que nada fue un gran pintor que en los cómics encontró un medio de expresión valiosísimo. Su arte, por la trascendencia que tuvo, es en la actualidad más vigente que nunca. La ficha de hoy, escrita por Javier Coma.

Clicar sobre la imagen para ver a mayor tamaño. Estas fichas fueron publicadas en la tercera de forros de cada fascículo de la Historia de los Cómics (Toutain Editor, 1982) y no han vuelto a ser reeditadas desde entonces. El © de los textos e imágenes pertenece a sus respectivos autores. Estas fichas se publican aquí con intención exclusivamente divulgativa y educativa.

domingo, mayo 27, 2007

VOLTAIRE EN VENEZUELA

Supongo que esta noche, en Venezuela, muchos recuerdan aquella bonita frase de Voltaire, que yo parafraseo porque no tengo a mano la cita exacta: “No comparto tus ideas, pero daría mi vida porque puedas seguir expresándolas”. Después del lacrimógeno cierre del canal RCTV esperábamos que el macaco de Chávez hiciera acto de presencia para aturullar al mundo con uno de sus flamígeros discursos: burritos de socialismo tropical sazonados con mucho alcanfor para que el pestazo a ideología muerta no atufe la manduca. No lo hizo, pero CNN en español entrevistó a uno de sus esbirros, que habló sobre el fin de la dictadura mediática. Me da mucha pena que el Macaco se proclame hombre de izquierdas: ay de mi pobre y querida izquierda, hoy convertida (cuando bien le va) en derecha civilizada, como en la España de Zapatero o la Francia de Segoléne (que no ganó, claro, no podía ser de otra manera; ella, como buena francesa, sí puede decir aquello de que alguien se comió su queso).

miércoles, mayo 23, 2007

THE COMICS JOURNAL, 282


El número de mayo de The Comics Journal tiene 200 páginas, muchas de ellas cargadas de buen texto, y cuesta trabajo creer que alguien tenga tiempo de leer completa esta revista norteamericana que se ha convertido en la gran referencia internacional sobre lo que debe ser una revista sobre los cómics. Entrevistas, reseñas, artículos de opinión… Lo bueno de las revistas es que no hay por qué leerlas completas, ya que ni todo interesa ni todo puede ser abarcable en una o varias sentadas. En esta ocasión las dos entrevistas largas, enjundiosas e imprescindibles del Journal vienen dedicadas a Fred Guardineer, un dibujante clásico (aunque de trascendencia muy menor), de quien se incluye la historieta Plague of Paris; en segundo lugar, una jugosa entrevista a Alison Bechdel, que con su novela gráfica Fun Home: A Family Tragicomic acaparó la atención de la intelectualidad norteamericana y se aupó con garbo en las listas de mejores libros del New York Times en 2006. Autora joven, habrá que seguirle la pista a Bechdel. Desde que en su número 262 el Journal remozó su apariencia, no ha dejado de reeditar dentro de la revista un buen boncho de páginas del cómic clásico norteamericano. En esta ocasión, para festejar la aparición de un volumen dedicado a la clásica y poco conocida revista Get Lost! (que durante tres números se atrevió a competir en 1953 con la revista Mad), el Journal presenta una antología de 33 páginas a todo color creación de Ross Andru y Mike Esposito que no tienen mucho que envidiar a Mad en sus primeros y mejores momentos. Como siempre, The Comics Journal: imprescindible.

sábado, mayo 19, 2007

LAS MUJERES LIBRES NO FUMAN

Me ha gustado la entrevista de hoy a Justo Navarro (novelista, crítico, poeta y traductor) en El País. Uno, que cada vez siente más asco de vivir en estos tiempos de puritanismo neovictoriano, sólo puede pelear a la contra predicando el mal ejemplo, la incorrección política para estos tiempos beatos en que la ciencia y la medicina han acabado por darle la razón a Dios, hecho que me duele enormemente. Debemos practicar la insumisión al orden establecido, aunque estos nos cueste pagar el precio de un pisito en el infierno. Una cita de la entrevista:

Nos estamos habituando a moldes de autoridad que vistos con la distancia de otros tiempos históricos nos espantaban. La vigilancia telefónica da que pensar, recuerda los sistemas de espionaje de Mussolini que permeaban toda la vida italiana a través de los "informadores voluntarios". Ahora tú eres el informador voluntario sin ir a la policía, sólo tienes que hablar por teléfono. Como el eslogan famoso que había en la Alemania del año 1938: "La mujer alemana no fuma". El tiempo que estuve en Roma el eslogan era: "La mujer libre no fuma", sólo cambia la palabra alemana por libre. El que haya cada vez más personas a favor de la censura, o del control de los contenidos de información que circula por los medios, son cosas que nos parecían indeseables, y las personas que defendían ese tipo de controles eran inadmisibles e indignos de confianza. El principio que está recuperando otra vez la censura es muy preocupante.

Para leer la entrevista completa, sobre best-sellers y otras cosas, clicar aquí.

jueves, mayo 17, 2007

FICHAS TOUTAIN LVI: HANS KRESSE

El Harold Foster holandés, hoy desconocido para la gran mayoría. Esta ficha fue escrita por Joan Navarro.

Clicar sobre la imagen para ver a mayor tamaño. Estas fichas fueron publicadas en la tercera de forros de cada fascículo de la Historia de los Cómics (Toutain Editor, 1982) y no han vuelto a ser reeditadas desde entonces. El © de los textos e imágenes pertenece a sus respectivos autores. Estas fichas se publican aquí con intención exclusivamente divulgativa y educativa.

jueves, mayo 10, 2007

CAHIERS DU CINÉMA EN ESPAÑOL

Aparece la legendaria revista Cahiers du Cinéma en español (la portada que adjunto es la del número 1 francés, dedicado a Sunset Boulevard, de Wilder). Dice su director, Carlos F. Heredero, que se distribuirá también en América Latina. Cuando yo era jovencito leía con gran gusto Casablanca, dirigida por Fernando Trueba, y sobre todo Dirigido Por…, que era mi favorita y presentaba sesudos estudios y análisis de directores. Miguel Marías era mi crítico más temido, no dejaba títere con cabeza ni respetaba mitologías ni santorales de nadie. Me hubiera gustado suscribirme a esta revista, pero no hace envíos al extranjero, lo cual es una pena. Fotogramas nunca me gustó, me pareció que era un catálogo publicitario, una cartelera editada en papel cuché que invertía demasiado espacio en anarrosadas. En fin, le deseo lo mejor a la andadura ibérica de Cahiers… Compraré algún número a ver qué tal, y ya veré si continúo con ella. Más información, aquí.

miércoles, mayo 09, 2007

TWIN PEAKS, 3: DOS TUBOS DE SHERILYN FENN


En Youtube hay multitud de cortes relacionados con Twin Peaks, la formidable serie creada por David Lynch, pero no hay casi ninguno en español. Quien sepa inglés puede, incluso, disfrutar de la serie completa a trozos, aunque buscar la hilación de 29 episodios desperdigados por el Tutubo debe ser una lata terrible. Acabo de llegar, más o menos, a la mitad de la segunda temporada, me encuentro en medio del caso de Windom Erle y estoy, literalmente, clavado al asiento, deseando llegar a casa para continuar. Me retracto cuando dije que al finalizar el caso de Laura Palmer no merecía la pena seguir hasta el fin. Yo cuando era jovencito no tenía las ideas claras. De aquí al domingo caerá lo que queda de serie, seguro, lo cual no deja de ser una sensación extraña: nunca he estado más enganchado con una serie televisiva. Pasando otra cosa, me hubiera gustado encontrar una portada de Rolling Stone de 1990 en que aparecían tres de las bellas actrices de la serie. Incluso quienes niegan a Lynch todo el pan y la sal, quienes lo vilipendian y ultrajan porque no entienden sus películas, no pueden negarle su buen gusto para las actrices. Twin Peaks, además de una de las cumbres del folletón televisivo y de una magistral revisitación de la novela gótica y de suspense, fue una serie de hermosas actrices: Sherilyn Fenn, Madchen Amik, Lara Flynn Boyle, Joan Chen, Peggy Lipton, Sheryl Lee, y una madura pero más sexy que nunca Piper Laurie me encantaban, y me siguen encantando, no sólo por su excelente trabajo con los personajes, sino porque todas juntas conforman uno de los retablos de la belleza femenina más consistentes e irrebatibles de la historia del medio. Yo desde siempre he tenido debilidad por la cautivadora Sherilyn Fenn, que interpretaba a la pequeña Audrey Horne, la colegiala enamorada del Agente Especial Dale Cooper a quien su curiosidad conduce a ser contratada como meretriz en el burdel de Jack el Tuerto, algo que casi le cuesta la vida. En el primer tubo les dejo la famosa escena en que Audrey supera la prueba de admisión en Jack el Tuerto, y en el segundo, una de mis escenas favoritas: invocando al Agente Especial Cooper poco antes de caer en las garras de las alimañas. Imprescindible Twin Peaks. Me lo estoy pasando en grande. Si me buscan y no me encuentran, es que estoy en Twin Peaks.

domingo, mayo 06, 2007

FICHAS TOUTAIN LV: HAROLD H. KNERR

Conocidos en España como Los Cebollitas, los personajes de The Captain and the Kids tuvieron doblete a cargo de Harold Knerr y de Rudolph Dirks. Eran, además, la versión estadounidense de una antigua serie alemana, Max und Moritz, creada por Wilhelm Busch. La creación de Dirks cumplirá este diciembre 100 años, aunque no cabe duda de que los tiempos que corren ya no son partidarios de seguir mostrando las aventuras de estos niños sinvergüenzas que desprecian y satirizan el mundo de los adultos. El atontinamiento de las nuevas filosofías educativas han proscrito a Pipi Calzaslargas y a otros niños terribles del imaginario colectivo de los más pequeños. No son buenos modelos para la clase de adultos que se espera que sean un día. Imagino que es mucho más educativa la violencia televisiva y la de los videojuegos. Mejor instruirles en la violencia que en la rebeldía, sin duda. La ficha de hoy fue escrita por el gran conocedor del cómic clásico americano Javier Coma.

Clicar sobre la imagen para ver a mayor tamaño. Estas fichas fueron publicadas en la tercera de forros de cada fascículo de la Historia de los Cómics (Toutain Editor, 1982) y no han vuelto a ser reeditadas desde entonces. El © de los textos e imágenes pertenece a sus respectivos autores. Estas fichas se publican aquí con intención exclusivamente divulgativa y educativa.

miércoles, mayo 02, 2007

TWIN PEAKS, 2: LA HABITACIÓN ROJA


Uno de los rasgos de originalidad de la serie Twin Peaks, como serie policiaca que era, consistió en la destrucción del hasta entonces más o menos imperante método deductivo del investigador. Acostumbrados como estábamos a encontrarnos con un detective que basa sus resultado en la deducción y el análisis, Lynch introduce al agente especial Dale Cooper, un estirado pero simpático detective obsesionado por el Tíbet que recibe sus pistas más importantes por medio de visiones que se producen en sueños. Así, en el episodio 2 de la primera temporada tenemos el sueño del Enano en la habitación roja. En el capítulo 1 de la segunda temporada, la primera aparición del Gigante. El Agente Cooper recibe sus pistas, por así decirlo, del más allá, y esto resulta perfectamente creíble (incluso en el marco de una serie policiaca donde se investiga el asesinato de una muchacha del pueblo) porque en Twin Peaks, se nos dice, flota un ambiente extraño, hay desde el principio de los tiempos una presencia misteriosa que todo lo envuelve y hace posible la conciliación entre el mundo real y el mundo onírico. Una vez establecido este planteamiento, hasta el espectador más reacio acepta la verdad de esta gran mentira y entra en el juego de Lynch, un juego donde elementos tan antiguos como el mismo arte teatral (la peripecia, el reconocimiento y el factor mágico o religioso) resurgen con una gran fuerza hasta entonces impensable en un producto comercial, un folletín en toda regla, destinado a las grandes masas devoradoras de pop-corn. Arriba he colgado un tutubo con la escena onírica de la habitación roja, diriga por Lynch. En ella, un avejentado Agente Cooper conversa con el fantasma de Laura Palmer. La escena, justamente famosa y del más puro estilo lynchiano, fue parodiada también por los Simpson en este otro tutubo que adjunto aquí mismo. Sin lugar a dudas, fue uno de los más impactantes momentos de toda la serie.


martes, mayo 01, 2007

SOY TWINPEAKÓLOGO

Por fin ha salido al mercado la segunda temporada de Twin Peaks, la atmosférica serie de David Lynch que a principios de los años 90 proporcionó un nuevo giro de timón a este arte de la serie televisiva, quizá la última heredera del folletón decimonónico. Yo vi Twin Peaks en mis tiempos de estudiante universitario, e incluso la grabé completa en video cuando TVE la volvió a emitir. Es, junto con Hill Street Blues, mi serie favorita de todos los tiempos. Soy un twinpeakólogo. Hace dos años la casa Paramount sacó al mercado la primera temporada (siete episodios), pero extrañamente no adjuntaron el programa piloto en los Estados Unidos, mientras que en la edición europea y mexicana el pack contenía los siete episodios de la primera temporada, y el piloto. El piloto, como todo el mundo sabe o debería saber, narra la aparición del cadáver de Laura Palmer (la chica más buena del insignificante Twin Peaks, un pueblillo entre montañas en la frontera con Canadá) y la llegada del Agente Especial del FBI Dale Cooper a esta localidad para resolver el asesinato. A esta irregularidad de la edición norteamericana de la primera temporada de la serie se añadió el hecho de que, durante dos años, la Paramount no sacó al mercado la segunda temporada, dejando en vilo a quienes se acercaban a ella por primera vez, nada menos que con el Agente Cooper herido de bala en el Gran Hotel del Norte y el caso de Laura Palmer sin resolver. Fue uno de mis regalitos de Navidad en 2005.
Después de dos largos años, la espera ha concluido este mes. Paramount ha sacado la segunda temporada (22 episodios), en cuyo episodio 16 concluye el arco argumental del asesinato de Laura Palmer. Los episodios que siguen, para mí, son prescindibles, ya que la serie comenzó a dar bandazos sin que nadie supiera hacia dónde se dirigía. A pesar de esto, el caso de Laura Palmer, formidable, ya pertenece a la historia del arte televisivo. Como hoy domingo es mi cumpleaños no me quise esperar a pedir la segunda temporada por Amazon (con un jugoso 35 por ciento de descuento), así que me la autorregalé en un vulgar Sangron´s. Pero claro, no tiene sentido comenzar desde el primer episodio de la segunda temporada, así que he reiniciado el caso de Laura Palmer desde el piloto: en total, 17 capítulos que dan cuenta de la vida de los extraños o pintorescos habitantes de Twin Peaks y del no menos extraño Agente Cooper (Kyle MacLachlan) intentando resolver el crimen de Laura Palmer. Teniendo en cuenta que la serie viene firmada por mi querido David Lynch, es una gozada completa: crimen, sensualidad, humor y surrealismo en uno de los mejores momentos de su creador. Twin Peaks es un melodrama noir, y fue su aire de melodrama colectivo posmoderno, onírico y un poco socarrón lo que desde su primer episodio convirtió la serie en un éxito en Estados Unidos y luego en el resto del mundo. Desde su ya clásico El hombre elefante (1980), Lynch no había obtenido tanto reconocimiento en su propio país, y desde luego, no lo ha vuelto a tener después, ni con el fallido intento de serie televisiva que fue Mulholland Drive, ni con ninguno de sus singulares filmes. Quizá sea la excepción su deliciosa The Straight Story (1999), una película tan sencilla y transparente que no parece de David Lynch.



Y vaya, pues como el día no tiene 48 horas y voy a dos episodios por día en las únicas horas que tengo libres durante la noche, ahora mismo estoy muy absorto revisitando Twin Peaks, razón por la que creo que voy a dar un poco la lata con esta serie durante un buen rato. Por lo pronto, os dejo arriba la apertura de la serie con el maravilloso tema de Angelo Badalamentti, cortesía de Tutubo, donde, por cierto, puedes buscar y encontrar en trocitos todos los episodios en inglés del caso de Laura Palmer. Más conveniente todavía es bajarte de la Mula de Alejandría la serie completa en el idioma que más te guste: español, italiano, francés o inglés.

¿Y por qué de la Mula? Porque, ay, las irregularidades no han terminado con la aparición de la segunda temporada. Al día de hoy quien quiera comprar también la primera temporada para ver todos los episodios seguidos descubrirá que ésta se halla agotada y que el precio más barato al que puede encontrarse (de segunda mano) es de 150 dólares por Amazon, y sin el piloto. Es duro ser twinpeakólogo en los tiempos que corren, así que ya saben, tiren de su amiga la Mulita si es que les interesa. Ah, por cierto, en España la segunda temporada la ha editado Paramount en dos cofres en vez de uno, con el consecuente aumento de precio con respecto a las versiones editadas en Estados Unidos y Latinoamérica (ambas en un cofre a la mitad de precio que en España). No cabe duda de que los hay chorizos, pardiez, luego no querrán que los pirateen.