NOTAS DE SOCIEDAD: MISS UNIVERSO

Ayer, la linda señorita Jimena Navarrete Rosete fue coronada como Miss Universete en la ciudad de Las Vegas, tan dilecta de tantos y tantas mexicanos y mexicanas de Juaritos parriba y pabajo. Aunque muchos temieron que jugara en su contra la respuesta que proporcionara a los anfitriones del certamen, en realidad la rumbosa tapatía ganóse los corazones de todos al reconocer con brutal sinceridad que se considera una chica sencilla, y no una niña prodigio: "No puedo pensar en nada" fueron las líricas palabras que brotaron de su boquita de piñon.

Comienza su reinado de un año, durante el cual la bella sirenita disfrutará de numerosas prebendas propias de su áulica condición, como una beca para estudiar en la Academia de Cine de Nueva York; un juego de diamantes obsequio de Diamond Nexus Labs; hospedaje durante un año en el Mandalay Resort de Las Vegas con derecho a consumición gratis del mueble bar (cortesía de Casa José Cuervo). También la empresa Farouk Systems se encargará del cuidado de su cabello durante su reinado, por lo que no tendrá que lavarse el pelo ella sola. Trajes de baño, cosméticos ilimitados de las marcas Dar Be Dar de Tala Rassi, y Kryolan, así como calzado de Nina Footwear y glamourosos vestidos de fiesta de Sherri Hill, muy adecuados para alternar durante los guateques de Nueva York tras las clases de Cine o sardina. Inobjetablemente, un sueño no sólo para cualquier doncellita mexicana de a pie, sino hasta de dos pies.

Algunos piensan que se trata, subrepticiamente, de un reconocimiento a México por la simpatía que genera al haber querido encuadrarse en el Pelotón de los Justos por su guerra contra el narco. Incluso el presidente Calderón ha declarado, vía Twitter Los Pinos, que "Servirá mucho a nuestra imagen como país”. Y es que, ¿acaso no habría paz en México con una Presidenta como ella? Aunque en lo personal yo deba confesar que, para mi deteriorado y chabacano gusto, a la delicada sílfide le falten las mantecas y lonjas propias de una buena sesión de charcutería erótica, no cabe duda de que se trata de un ejemplo para todas las jovencitas mexicanas, sobre todo para aquellas descarriadas que antes prefieren abrevar en la pestífera poza del sicariato que deslomarse tras la cola del cometa de un sueño que sí puede volverse realidad. Cortesía de Milenio, una muestra del superlativo encanto y los vivarachos dones de la simpar gacela que hoy encarna el sueño de tantas doncellitas en la edad de las ilusiones, y, ¿por qué no decirlo?, de las alusiones.