viernes, marzo 14, 2008

JESÚS BLASCO Y CUTO IV: COLOFÓN

Como colofón, quiero dejar aquí unas viñetas de En los dominios de los Sioux. La formidable obra de Jesús Blasco para Cuto es hoy inencontrable en las librerías. Sigue faltando en España (y en buena parte del mundo) un fondo editorial que permita acceder de manera permanente y satisfactoria a los clásicos. Yo abogo por la digitalización de los fondos editoriales y su venta en deuvedés que permita el acceso a grandes fondos de material. Hoy día sería inviable una edición completa y en papel de, pongamos por caso, Roberto Alcázar y Pedrín, pero la obra completa en unos deuvedés resultaría muy antojable para aficionados, completistas, historiadores y fundaciones o instituciones públicas que deberían salvaguardar la cultura de nuestro país.

Algo así ya lo está haciendo Digital Funnies. Desde este punto de vista, los entusiastas aficionados que convierten el E-Mule en La Mula de Alejandría deberían ser más imitados que perseguidos por un capitalismo mucho más salvaje que ecuánime. Tanto estas obras como otras de Blasco para Cuto pueden encontrarse a golpe de clic por medio de esta referencia insoslayable que hace del P2P el único intercambio de cultura verdaderamente universal que podemos tener en estos tiempos de grandes diferencias culturales y económicas entre los mismos países de occidente. Es una pena que sean aquellos a quienes más debemos, los artistas, quienes más perjudicados se vean por este trasiego indiscriminado de películas, música, libros o tebeos. Es una situación que habría que estudiar por el bien de todos, autores implicados y replicantes.

Es necesario decir que estas dos historias largas fueron publicadas originalmente a color dentro de las páginas de la revista Chicos. Una reedición de todo el material de Blasco para Cuto, no sólo es necesaria ya, sino urgente. Se trata de una obra de gran relevancia artística que no debería continuar en el olvido. Una buena edición moderna debería respetar y restaurar aquellos colores, ya que, a pesar de que Blasco fue un genio del pincel y del sombreado (sólo hay que revisar la reciente reedición de su Steel Claw en Titan Books), concibió su obra para ser publicada en colores, algo que no deja de advertirse en una edición en blanco y negro como las que yo poseo, buenas ediciones sin duda para la época, pero hoy ya totalmente superadas.

Adjunto algunas viñetas donde apreciar algunos detalles que quisiera señalar. Por ejemplo, influencia de Alex Raymond en el dibujo de ambientes y personajes de esta refriega de saloon: las líneas de sombreado del suelo, los jirones de ropa desgarrada de los personajes, además del perfil rudo del individuo que toma la botella en la viñeta 3 remiten a Alex Raymond, y en concreto, al ambiente de interiores sórdidos y oscuros de las historias que Raymond dibujó para Secret Agent X-9, que escribía entonces (esto siempre ha sido objeto de debate) el celebérrimo Dashiell Hammett, padre fundador de la novela negra.

Y en último lugar, no podía dejar pasar estas dos viñetas, donde Jesús Blasco hace morir a Cuto (todo es finalmente un sueño, como vemos en la página final de En los dominios de los sioux), y decide plasmar la agonía de su personaje inspirándose en el estilo del ya famoso pintor surrealista Salvador Dalí. Incluso cuando Blasco recurre a modelos bien conocidos de todos y se inspira en ellos, prescinde de la copia. Estudia el estilo que pretende imitar, y a continuación lo reproduce conservando muchos de los rasgos característicos del homenajeado, pero adaptándolo a sus propias necesidades y siendo capaz de una recreación, pero de ninguna manera una copia. Esta es, sin duda, una de las señas de identidad de los grandes: la capacidad de refundir y recrear el objeto de su estudio y de su homenaje para conseguir la creación de algo nuevo. Más sobre Jesús Blasco en la red: aquí, una compilación de viñetas de Blasco en Comics en Extinción, que incluye la última aventura (inacabada) de Cuto: Hampa Mundial INC., y aquí, una de piratas donde se puede apreciar el formidable uso que del blanco y negro llegó a tener Jesús Blasco.


Jesús Blasco, Tragedia en oriente. Colectivo Noveno Arte. Valencia, 1979.
Jesús Blasco, En los dominios de los Sioux. Barcelona, sin fecha.

2 comentarios:

Emilio Aurelio dijo...

Gran artículo para un auténtico cómic en extinción. Creo que sería el 1º a recuperar de la producción nacional. Equiparable al lince ibérico,`por seguir con la analogía.

La documentación gráfica, inestimable, cada día mas dificil de encontrar.

Un saludo.

El Pobresor Gafapasta dijo...

Esperemos que pronto alguien (y pienso en Glénat) vuelva a sacar las historias de Cuto en integrales, un formato que ahora está tan de moda. No debe ser que Blasco siga olvidado más tiempo.

Un saludote.